Descubrimos pinturas rupestres en Picos de Europa. Las fotos que aquí os mostramos las hicimos en una cueva de libre acceso, que no las tiene registradas. Descubrir unas pinturas rupestres es el sueño de todo espeleólogo. No cabe la menor duda que entrar en una cueva, explorarla por primera vez, tiene algo de mágico. Hay algo de te impulsa a avanzar tratando de encontrarte con un tesoro perdido en el tiempo. Los libros de aventuras que todos leímos o nos leyeron cuando éramos pequeños, las películas de piratas, tienen mucho que ver con esta afición que nos lleva a las profundidades de la tierra para toparnos con formas, relieves y colores tan caprichosos que solo se dan en cuevas más o menos profundas. Os podría relatar con miles de palabras, lo magnificas que son las formaciones que debajo de nuestros pies se hallan, pero hoy no va de esto mi reportaje. Hoy quiero hablaros de un paso más allá, de la fortuna que tuvimos al toparnos con estas pinturas rupestres. Antes deciros que no somos unos espeleólogos supercomprometidos, de esos que no hay semana que dejen libre para otros menesteres. Hace unos meses, sin salir del entorno de Picos de Europa, entramos en una cueva de no muy difícil acceso, que no está vetada al público en general y que tampoco hasta la fecha tiene como interés ver estas pinturas rupestres. Solo queríamos pasar una mañana agradable, en familia, sin clientes y sin grandes retos. No era la primera vez que yo entraba es esta cueva en cuestión y eso me hizo avanzar más lento que otras veces. Enfocaba con mi frontal a lugares distintos, algo impropios, cuando en decimas de segundo una imagen se graba en mi retina. -¡No puede ser!, me digo al volver a repasar mi haz
Descubrimos pinturas rupestres en Picos de Europa. Las fotos que aquí os mostramos las hicimos en una cueva de libre acceso, que no las tiene registradas. Descubrir unas pinturas rupestres es el sueño de todo espeleólogo. No cabe la menor duda que entrar en una cueva, explorarla por primera vez, tiene algo de mágico. Hay algo de te impulsa a avanzar tratando de encontrarte con un tesoro perdido en el tiempo. Los libros de aventuras
